
Nacido en Montesquiu (Barcelona) y dedicado al arte como escultor durante 30 años, Ramón S. Viñas dirigió una galería y trabajó en prensa como periodista y dibujante durante una década.
Desde hace unos años gestiona la plataforma Objetivo Arte, dedicada a ayudar a los artistas a vivir de su vocación ofreciéndoles todo tipo de recursos y conocimientos, la gran mayoría de ellos gratuitos y a la vez desconocidos para cualquier artista que está en sus primeros años abriéndose camino en el mercado.
Miquel Cazaña: Ramón, cuéntanos un poco sobre ti y tu recorrido artístico. ¿Cómo fueron tus inicios?
Ramón S. Viñas: Mi formación fue en el campo de las Artes Plásticas y la Publicidad. Me inicié profesionalmente como dibujante y como diagramador de periódico, realizando la mayor parte de esta actividad en la prensa tinerfeña, aunque también en algunos medios peninsulares.
Durante varios años también trabajé como redactor, principalmente de temas culturales.
Dirigí una galería de arte y me entusiasme con la escultura al asistir a un taller de modelado.
A partir de ahí, cambió mi vida. A los 35 años dejé el periódico y la galería. Me trasladé a Granada y durante 30 años he vivido exclusivamente de, por y para la escultura.
M.C. ¿Por qué rama artística te has movido? ¿Dónde podemos ver tus trabajos?
R.V. Desde una libre interpretación, siempre he trabajado dentro del campo figurativo.
En lo que se refiere a la obra personal, en mi trabajo escultórico ha estado presente la preocupación por lo estético y por una conceptualidad etérea del ser humano.
Al principio, mostraba mi trabajo a través de exposiciones en galerías de arte e instituciones. En los últimos 20 años, he trabajado exclusivamente por encargo.
Mi obra figura en colecciones privadas, iglesias y espacios públicos.

M.C. ¿Y en cuánto a tu labor cómo galerista? ¿Cómo decidiste dar este salto?
R.V. En la década de los ochenta, me ocupé en prensa de una sección semanal dedicada a exposiciones y artistas y diariamente de temas culturales.
Paralelamente a estas actividades, se me ofreció regentar la galería de arte “Círculo XII”, de Santa Cruz de Tenerife. Durante seis años me ocupé de dirigir esta galería, en la que se expuso una amplia programación de artistas isleños y peninsulares, creando una estrecha vinculación con varios miembros de la Agrupación de Acuarelistas de Cataluña por la relevancia que tenía esta modalidad artística en las islas. La programación de la galería se alternaba a lo largo del curso con exposiciones de diferentes tendencias, con la finalidad de mostrar al público el mayor número posible de expresiones artísticas.
M.C. Y, finalmente, te encontramos en Objetivo Arte, una magnífica plataforma en la que se deduce estar leyendo a alguien con mucho bagaje a sus espaldas en el mundo del arte. ¿Este proyecto surgió de tu experiencia como galerista? ¿Qué te llevó a ayudar a otros artistas a emprender este camino?
R.V. Siempre he tenido vigente mi inquietud por el periodismo cultural y desde el año 1998 que empecé con un portal de arte ( Gestión de Arte, posteriormente Arte y Mercado) he tenido presencia en internet divulgando el microambiente del arte, bien sea desde la estructura de mercado o desde la perspectiva del artista.
Como son temas que me apasionan y me he ocupado durante años de que estuvieran presente en mi vida profesional, en Objetivo Arte hablo principalmente de cuáles son las oportunidades para lograr vivir del arte, de los inconvenientes que hay que superar, de la relación que existe entre el artista y la sociedad, de las trabas que se pone uno mismo y de las que se encuentra al decidirse a ser autónomo, de la relación del artista con la Administración, también de las posibilidades de la venta online y del blogging en general.
Escribo en el blog porque me gusta compartir y si lo que cuento puede ayudar a alguien en su trayectoria artística me satisface. Son años de experiencia de tener que ingeniárselas para poder vivir exclusivamente del arte y lo cuento en Objetivo Arte, aunque puede que no sea aceptado por todo el mundo. Sin embargo, en algún momento, son situaciones por las que hay que pasar o actitudes que hay que adoptar para salir adelante.
Me gusta interactuar conociendo la opinión de otros compañeros y el blog me lo permite.
Objetivo Arte – Un estilo de vida
M.C. Leyendo Objetivo Arte, uno de los aspectos que se remontan a menudo y en los que me he sentido más identificado es en de la búsqueda de la libertad y de vivir la vida que deseas, y no la que te dicta tu entorno o la que se espera de ti. ¿Hasta qué punto te recompensó lanzarte al arte y seguir lo que te guiaba el corazón? ¿Alguna vez piensas cómo habría sido todo si hubieras continuado en ese trabajo aburrido hasta hoy?
R.V. Todo tiene su precio. En su momento cambié la estabilidad y seguridad profesional que tenía por algo incierto que era dedicarme por completo a la escultura. Una familia dependía de mí y decidí empezar de cero con un trabajo nuevo, en un sitio diferente y con un mercado por hacer. Difícil decisión.
Quería disponer de mi tiempo las veinticuatro horas del día, sin estar sujeto a horarios y tener la libertad de crear. Esta independencia pasa factura y debes saber administrarla porque puedes terminar siendo esclavo de tu propia libertad. Hay gastos fijos a los que hay que hacer frente y tienes una responsabilidad por un trabajo con ingresos inestables. Un mes te va bien y el próximo fatal. Debes saber administrar muy bien los tiempos y los recursos.
Para vivir del arte debes tantear todas las posibilidades que el mercado te ofrece con la fórmula “prueba-error” e ir ajustando la experiencia. No hay que tenerle miedo al fracaso, porque de los peores errores se han creado éxitos indiscutibles.
Con mi trabajo como escultor he tenido muchas satisfacciones, tanto a nivel artístico como personal. De nada sirve pensar como me habría ido de continuar con el trabajo que tenía. Tomé hace treinta años una decisión y lo hice con todas las consecuencias. Ahora, con la perspectiva de los años, puedo decir que no me ha ido mal.
Se me pasan los días sin darme cuenta. Disfruto con lo que hago y cada día me veo inmerso en nuevas ideas y proyectos que me ilusionan como al principio.
M.C. Otra cosa que me gusta mucho de Objetivo arte es la voluntad por no dejar flecos sueltos y abordar temas tan variados como los miedos que nos esperan al empezar, los intermediarios en el mercado, la venta online, las formas de exponer, el hacer un blog o el material indispensable que uno debe tener. ¿Qué es en lo que a ti te parece que hay que dar más prioridad o qué es lo que fue más determinante abordar en tu camino?
R.V. Los principios no son fáciles. Tuve que trabajar tanto en el taller como promocionando mi obra, hasta que conseguí un hueco en el mercado y logré una clientela, más o menos, estable.
Es muy importante ser perseverante y confiar en lo que haces. El trabajo bien hecho es la mejor garantía para tener éxito. El camino está lleno de obstáculos. Dedicarte plenamente a tu carrera artística requiere de autoestima, constancia y determinación para conseguir el objetivo que te hayas propuesto.
Debes tantear todas las posibilidades que el mercado te ofrece con la fórmula “prueba-error” e ir ajustando la experiencia. No hay que tenerle miedo al fracaso, porque de los peores errores se han creado éxitos indiscutibles.
La finalidad es poder vivir de tu creatividad sin sobresaltos. Hay que estudiar las posibilidades de mercado y descubrir que es lo que uno puede ofrecer para marcar la diferencia o para lo que realmente está dotado, en base a una técnica, temática, formato o nicho de mercado.

M.C. Es curioso porque, leyendo Objetivo Arte, veo que se le da cierta importancia a exponer en galerías pero a la vez todo va dirigido a que el artista desarrolle por su cuenta todas las habilidades que antes hacia el galerista. ¿El galerista como único promotor y sustento del artista ha desaparecido del todo?
R.V. El mercado de arte está cambiando. Las galerías de arte ya no tienen el volumen de negocio y el protagonismo que ostentaban hasta ahora. Sin embargo, para el artista, la relación con las galerías sigue siendo necesaria para que pueda canalizar a través de ellas la difusión de su obra. Regulan el mercado y dan credibilidad al artista, promocionando, difundiendo y comercializando su obra.
Por otra parte, el artista tiene hoy en día a su alcance unas posibilidades inmensas que le ofrecen las nuevas tecnologías. Internet significa un escaparate para su trabajo a nivel global disponible las veinticuatro horas del día. Debe saber aprovechar esta oportunidad porque le permite difundir y vender su obra directamente en un mercado online sin fronteras. Asimismo, el artista que utiliza las nuevas tecnologías depende menos de los canales tradicionales de comercialización y, cada vez más, promueve su trabajo y afianza su marca personal en un circuito más amplio.
M.C. En todos estos años habrás visto cambiar mucho el mundo del arte. Sin embargo, hoy día todavía esperamos que las respuestas y las oportunidades vengan de fuera cuando en realidad nosotros tenemos que ser un motor que impulsa el exterior con sus propuestas. ¿Te parece que ese es un asunto generacional que va cambiando con los jóvenes, o ves que los nuevos artistas todavía esperan un marchante que les proporcione contactos y les conduzca al éxito?
R.V. Lo ideal seria poderse dedicar por completo a crear y dejar que otros se ocuparan de la comercialización de la obra. No siempre se consigue. El artista emergente debe saber como desdoblarse entre artista y empresario. Debe tener en cuenta los contextos en los que se desarrolla el arte actualmente y los cambios que se están produciendo en las estructuras del mercado, producción, promoción y difusión.
El mundo del arte está cambiando, tanto en su estructura comercial como en la aparición de nuevas modalidades artísticas, y el rol del artista ahora es otro al que tradicionalmente conocíamos.
El artista tiene que ganarse la vida dignamente con su trabajo igual que los profesionales autónomos de otras especialidades y ello significa tener que actuar también empresarialmente.
M.C. Qué podemos esperar en el horizonte de Objetivo Arte. ¿Qué nuevos retos te esperan, Ramón?
R.V. Igual que los miedos son muchos y hay que afrontarlos para superarlos, las dudas que se le presentan a cualquier creativo son constantes y hay que resolverlas. Hablando de ellas y compartiendo experiencias podemos ayudar a otros artistas. El capítulo de la comercialización es el que más interés despierta y en Objetivo Arte me ocupo de aportar información desde diversos enfoques.
Ayudando a los demás, se ayuda uno mismo. Mi reto actual es seguir haciendo lo que me gusta. Disfruto escribiendo en el blog y trabajando en el taller. Si el contenido de Objetivo Arte sirve de ayuda o de orientación profesional a otros compañeros es una satisfacción para mí escribir cada día. Entrar en el taller cada mañana es encontrarse con la ilusión de lo que un día fue un sueño y hoy es una realidad: vivir dignamente del arte.
Si te ha gustado esta entrevista, te invito a que veas la entrevista a Fidel Gómez, creador de Arte para la vida