
En el artículo anterior hablamos de las tablas de Excel en las que anotaremos los ingresos y los gastos de cada mes. Con lo cuál a final de año podemos hacer estadísticas con gráficos y ver en qué se consume más y en qué menos, cuál es la media de gasto en cada sección y miles de cosas más, y ver así en qué aspectos podemos introducir cambios.
De todas formas, el Ahorro es la otra acción más recomendable que se puede llevar a cabo desde el principio para revertir la precariedad económica o, si más no, la sugestión o el sufrimiento por el tema económico,
Si os fijáis, cuando no tenemos nada en nuestra cuenta corriente o tenemos lo justo para salir del paso, la preocupación y la consiguiente sensación de estar con el agua al cuello suele ser trending topic en nuestro coco. Si no es así, y estamos tranquilos estando a cero, ya tenemos mucho ganado para ser emprendedores porque querrá decir que tenemos una alta tolerancia al riesgo. Pero si por el contrario nos preocupa y nos angustia ir con lo puesto y no saber de dónde saldrá nuestro próximo euro, es porque la indicación que en realidad le mandamos a nuestra mente al ir al cajero o al pagar cualquier cosa es que de eso (dinero) hay lo justo justito.
Cuando no tenemos nada en nuestra cuenta corriente o tenemos lo justo para salir del paso, la preocupación por vivir bajo un puente suele ser trending topic en nuestra cabeza. Y eso nos agota mental y físicamente
Ahorro programado
La clave creo que prácticamente todo el mundo la puede poner en práctica, y se trata de guardar un tanto por ciento de cada ingreso que recibamos. Habitualmente se recomienda guardar un 10% de todo lo que entre. Cobro 400 euros, guardo 40. Cobro 200, guardo 20. Cobro 1400, guardo 140. Y así siempre y sistemáticamente. Se puede guardar en otra cuenta exclusiva para el ahorro, o se puede guardar en otros lugares, o repartido. Pero debe ser un dinero para ir creando un excedente o un fondo de tranquilidad que no se tocará bajo ningún concepto salvo una emergencia de primera necesidad.
En este sentido, hay quien recomienda que el colchón sirva para poder vivir sin trabajar seis meses, otros un año, otros dos años. Por eso, al principio, si uno combina un trabajo artístico freelance con otro que ni le va ni le viene (o directamente hace a disgusto), lo más lógico es que si puede guarde muchísimo más de un 10%, porque el tiempo que consumes en ese otro trabajo ya no volverá, así que por lo menos si guardas un porcentaje alto de lo que te paguen, será sustento que dejará de preocuparte después.

A la larga, la sensación de urgencia va desapareciendo porque hemos creado un excedente de dinero, que al final es de lo que se trata. Ya seas empleado o freelance, no irás buscando trabajos o intentando vender tus cuadros de la misma forma si tienes 300 euros en el banco que si tienes 10.000, 20.000 o 50.000. En el primer caso, la sensación de urgencia estará muy presente y eso puede hacer sin duda que pierdas de vista que lo importante son las necesidades e inquietudes de tu cliente, no las tuyas.
¿Qué no se puede ahorrar un 10%? Pues un 5%. Realmente es más importante el hábito que la cantidad en sí.
Hábitos financieros
Es verdad que en una situación con hijos, hipoteca a 40 años y 50 gastos más, cualquiera habla de Ahorro, pero creo firmemente que en cualquier caso todo esto es posible, que en gran medida es una cuestión de voluntad y de hábitos. Hábito de hacer las cuentas mensuales y repasar donde falta inversión y donde hay despilfarro, hábito de guardar a buen recaudo una parte de lo que se cobre, y algunos hábitos más que iremos viendo en estos capítulos dedicados a finanzas.
Al final, más allá de los sistemas y de los hábitos, lo más importante estés en la situación que estés es escucharte a ti mismo y atender aquello que tu alma te reclama que hagas. Siempre puedes dedicar un tiempo al arte o a cualquier otra actividad o don que tengas, aquello que tanto te llena y que ahora está en el baúl de los recuerdos. Así como también creo sinceramente que cualquiera puede dedicar un poco de tiempo a estudiar su economía y estudiar también variables que aplicar para disponer de más tiempo y dedicarlo a su pasión.
Con el dinero ganas tiempo puesto que no necesitas consumir tiempo trabajando en otra cosa que te gusta mucho menos
Con el dinero ganas tiempo puesto que no necesitas consumir tiempo trabajando en otra cosa que te gusta mucho menos. Y el tiempo es oro, como decía aquél programa de tv, puesto que teniendo tiempo puedes seguir pintando y avanzar. Recordemos aquello que se dice de que se necesitan unas 10.000 horas o 7 años de experiencia para desarrollarse como profesional en cualquier campo. Cuanto antes las consigamos, mejor.
El futuro de las pensiones
En cualquier caso, seas artista o no, si naciste después de 1963 el ahorro te va a venir fenomenal para cualquier emergencia o incluso para retirarte. En muy pocos años se jubila toda la generación denominada como Baby Boom, y como consecuencia de ser el segundo país más envejecido del mundo después de Japón, en España habrá mucha gente jubilada y poca gente cotizando. Entre eso y que la hucha de las pensiones está temblando a causa de la mala gestión que se ha hecho de la misma, no se augura un futuro muy prometedor a los de mi generación (1980), así como a los anteriores o a los posteriores.
No digo que no haya que apostar por este sistema, ni dejar de luchar por él introduciendo las mejoras necesarias, todo lo contrario. Pero sí creo que al margen de la necesaria y prioritaria lucha social podemos mirar hacia el negocio que tenemos entre manos y ver de qué opciones complementarias disponemos a partir de nuestra mente y de nuestra imaginación. A partir del capítulo siguiente llegan algunas variables (las que he aprendido o descubierto hasta la fecha) que nos pueden ayudar a avanzar más deprisa. ¡Allí te espero!